Èl es mi amigo fiel!

El mate debe ser algo tan tradicional en nuestras vidas, tomemos o no, que muchas veces no pensamos de dónde proviene o cuál es su verdadero origen, así que para todos aquellos materos como yo,y para los no materos tambien (¿Por qué no?) una breve explicación de los origenes de este gran amigo.
De acuerdo con las investigaciones realizadas por Amaro Villanueva, el mate, cebado con bombilla y agua caliente es creación de los indígenas guaraníes.En la lengua guaraní,la yerba se denomina caá, pero como los españoles la recibían de los indios ya tostada y molida, no imaginaron que procedía de un árbol, y la llamaron hierba del Paraguay o simplemente yerba.
En cuanto al recipiente utilizado para cebarlo lo llamaban "caiguá". Esta palabra guaraní provenía de la unión de tres palabras:caá(yerba),i (agua) y guá (recipiente), o sea que el mate significa
"recipiente para el agua de la yerba".Sin embargo,los conquistadores españoles prefirieron usar la palabra MATE, extraída de la lengua quechua por fonética, ya que la palabra originaria es "Mati" que significa vaso o recipiente.
Sin embargo, La primera referencia del uso de la YERBA - MATE en estas tierras llega a través de Hernandarias en 1592, quien a partir de sus observaciones relatadas por Ruíz Díaz de Guzmán en el libro "Breve Historia de etapas de Cosquista"(1612),da cuenta de que los indios
llevaban, junto a las armas, unas pequeñas bolsas de cuero en las que guardaban hojas de yerba mate triturada y tostada que masticaban o colocaban en una calabaza con agua y tomaban ya sea usando sus dientes como filtro o por medio de un canuto de caña.
Según los españoles estas hojas les daban mayor resistencia en las labores diarias o para las
largas marchas ya que a veces tardaban un año en volver a sus hogares.
Estas situaciones ocurrían en los territorios que comprenden actualmente parte de Paraguay y las provincias argentinas de Corrientes y Misiones.
Juan Parish y Guillermo P. Robertson, en su relato "El Vivac" (1815), expresan: "La primera
distracción del gaucho, después de cumplido su afanoso trabajo, es el mate.
De manera que, tan pronto como terminaban sus tareas, salían a relucir las rústicas y abolladas
calderitas y enseguida podía verse a los hombres llenando los mates y chupando las bombillas, mientras caminaban a paso lento o bien permanecían sentados junto al fuego sobre una cabeza de vaca y fumando cigarrillos de papel.
De esta manera, los gauchos lo asimilaron como principal fuente de alimentación, y lo incorporaron en sus costumbres cotidianas transmitiéndola a generaciones que le precedieron y convirtiéndolo en un ámbito tan difundido y propio de nuestra cultura actual.
En la actualidad, el mate es un ícono profundamente tradicional e identificatorio en nuestro país. Tanto chicos como grandes, amigos y familiares comparten el mate, que se transformó en una companía en las tardes de estudio o bien como un compañero mas de charlas y juntadas, o en largas jornadas laborales.

En mi caso particular, creo que soy matera de alma. En mi familia todos toman mate, pasando por mis abuelos, mis tios, mis viejos y yo, motivo por el cual fue dificil no sumarme a la camada de materos y la verdad es que de 24 horas que tiene el día,creo que 15 me la paso tomando mate; en todo momento, en el trabajo,en mi casa,con amigos, en las noches de estudio e incluso cuando no se que hacer!

en fin...!

Simplemente, el mate